Emma Pérez-Romera, Unidad MK.
¿Por qué este nivel de compromiso?
Porque en un negocio como el nuestro, en un mundo cambiante como el que nos movemos, es imprescindible estar al día en todo lo que concierne a Mary Kay y recibir dosis continuas de información, formación y motivación, para trasladarlo a nuestra práctica diaria y obtener resultados.
Eso es lo que encontré allí. Mujeres comprometidas con su negocio, ávidas de aprendizaje, lideradas por Aitziber y, con ella, otras empresarias nacionales que trabajan el día a día con fortaleza y determinación.
Es una suerte haberlas tenido tan cerca, haber escuchado cómo comenzaron en sus negocios, cómo emprendieron no sin riesgos y con mucho esfuerzo, cómo se siembra en Mary Kay y cómo se recogen los frutos, qué trucos usan ellas en sus clases, como empatizan con sus clientas, la actitud con la que enfrentan sus clases ...
Un CSC en el que también hubo momento para los reconocimientos por los logros conseguidos, mi primer escenario también.
Un cúmulo de emociones entre mujeres desconocidas pero con un objetivo en común: dar lo mejor de nosotras mismas para ser en la vida mejores personas y dar a nuestras familias, a nuestros hijos quien los tenga, lo mejor en el futuro. Eso es Mary Kay: pasión, compromiso, emprendimiento y, ¿por qué no? resiliencia.
Gracias, Atziber, por tu energía, contagiosa y vital en Mary Kay.